viernes, 15 de marzo de 2013

HABEMUS TRIMARAN

Hoy, 15 de Marzo de 2013, a las 14hs 59min, el trimaran TITANIO tocó el agua por primera vez, 11 días antes de cumplirse 4 años del inicio de la construcción.


14:59 hs del 15 de Marzo de 2013. La orza del Titanio a punto de tocar el agua.



 Por primera vez lo veo con los 2 pontones desplegados. ¡Y en el agua!


Y sí, el motor es Parsun -una de las cosas que con el tiempo se fué achicando-, por ahora arranca... y bueh, en 24 cuotas en pesos... solo me tiene que sacar de la bahía del club, no le voy a pedir mucho.

 Ya en su amarra.

En al agua voy a terminar el alistamiento. Salvo alguna línea de flotación mal calculada en los pontones, todo salió como debía ser.
Salimos a dar una mini vuelta por la bahía contigua al club, con los pontones plegados. La primera sensación es que el barco es muy liviano, solo con el viento ya se nos iba, parece un barrilete! La orza quedaba flotando a media agua ya que todavía no le puse el motón para el cabo que la mantiene abajo, por lo que se me iba de ronza bastante;  la respuesta del timón es inmediata a pesar de lo chico que parece.

Ahora a esperar el palo y las velas, mientras tengo que terminar con la maniobra, y el interior.

Si tuviera que agradecer a todos no termino más. Pero no quiero dejar de mencionar a algunos. A Laura, mi compañera, sin su apoyo y garra para "cubrirme la espalda" esto hubiera sido imposible; a Pablo, que como tantas veces en la vida me sostuvo en todo, desde lo emocional hasta lo material; a Nacho y Pablo Mendive, a Claudio Alvarez, que me acompañan en esta pasión y tambien alientan siempre. A los amigos de los foros, que tambien empujan con palabras de aliento, que llegan, créanme, y sirven. A Daniel del Sirius que quizás sin proponérselo sirvió de inspiración para el empujón inicial, para el "sí, se puede". Todos ellos me hicieron creer que esto no era una locura, que se podía llevar a cabo.
La verdad que no me puedo quejar. Son casi nulos los "agoreros", los que durante todo este tiempo pudieran tirar pálidas. Si hubo, se las guardaron para sí mismos. Casi siempre recibí comentarios positivos, de felicitación, de buena onda, de apoyo. No pensé que fuera así.

Bueno pero paremos (me digo a mí mismo), todavía falta.

Si miro para atrás no puedo creer el tiempo que pasó y todo lo hubo que hacer para llegar hasta acá. Pero mejor mirar para adelante: parece que lo bueno recién está por empezar.