martes, 12 de diciembre de 2017

Ian FARRIER






Hoy, 12 de Diciembre de 2017, me enteré de la triste noticia del fallecimiento de Ian FARRIER.

Un shock inesperado, ya que el tipo se lo veía con las energías de siempre culminando su proyecto del F-22 de serie en Farrier Marine; actualizando la web, perfeccionando la producción.

Una pérdida muy grande para la náutica. Se va el diseñador que quizás haya dejado la huella mas grande en la náutica de multicascos de crucero. Mas allá de varios otros muy importantes diseñadores, Ian Farrier puso al trimarán de crucero en la mesa de la náutica. Por cantidad (por lejos) y por calidad de diseños. Un genio, un perfeccionista.

En un mercado esquivo al velero multicasco, fundó Corsair Marine en 1984 y en base al diseño brillante del F-27, y a la altísima calidad de construcción, llevó a la compañía a vender mas de 100 trimaranes por año, mas de 2 por semana; estamos hablando de un barco que se hacía todo con vacío, espuma de pvc, y la mejor calidad en un barco de serie de 3 cascos y 4 amas....
El F-27 es el único multicasco, aparte del Hobie 16, que fué introducido en el Salón de la Fama de Veleros Americano (American Sailboat Hall of Fame) en 2004, junto con otros 24 barcos (como el J24 o el Laser) por ser "un diseño innovador que tuvo un tremendo impacto en la navegación" al permitir a los propietarios la navegación en multicascos sin la molestia de la ancha manga  en marinas, y trailers. 

Su sistema de plegado de brazos (patentado en 1973) fué unico, todos sus diseños permiten pasar del trailer al agua listo para navegar en media hora, por una sola persona. Una genialidad no alcanzada por ningún otro sistema hasta ahora. Y copiada por varios....

Dibujó muchos diseños para los constructores amateurs del mundo; la calidad de sus planos son indiscutiblemente superiores a cualquiera. Lo que permitió que gente común pudiera acceder a sus diseños.

Mas de 4000 barcos Farrier navegan por el mundo. Yo tuve la suerte allá por 2007 de toparme con sus diseños por Internet, y de empezar a soñar. Y gracias a Ian Farrier, que ese sueño se haga realidad.

Hoy, el Titanio está de luto.

Gracias por hacer mi vida náutica mas feliz. QEPD, Ian Farrier.





martes, 26 de septiembre de 2017

Misceláneos


No hay mucho para contar, solo algunas cosas de estos meses.
Navegaciones, menos de las que uno espera. Los avances van muy de a poquito. Proyectos familiares (mudanza), el invierno y mucho trabajo, no permiten mas. Pero bien.
Los Highfield levers, un golazo. Farrier me mandó los planos, y gracias a mi primo Claudio el tornero, pudimos hacer la versión nacional y popular; en el mundo civilizado los vendía una compañía. Digo "vendía" en pasado, porque la verdad es que en aquellos lares la mayoría (de los trimaranes Farrier) están reemplazando los HFL y toooda la jarcia de inoxidable, por sintético: el avance de las fibras sintéticas (cabos de Dynema) producen cabos que a mismo diámetro tienen mas resistencia que el cable de acero inoxidable, y pesan muchísimo menos. Y los precios se hacen cada vez mas accesibles, y encima no hay que contratar a un profesional para cambiar todo.  Por ende, desde hace una década mas o menos la mayoría de allá se pasa al mundo del sintético. La gran desventaja, que todos expresan en los foros: la facilidad-rapidez de maniobra de los HFL. Es lo que dicen extrañar los "conversos". Tienen que atar y desatar cada vez que abren los pontones. En ese sentido extrañan a los HFL.
  ¿Por qué no puse yo cabos sintéticos en el Titanio? Porque por estas latitudes, el agujero en la capa de ozono no lo permite! Créase o no, el sol que tenemos acá es mas dañino que el del caribe, en plena zona ecuatorial. Y los cabos, si son expuestos todo el tiempo al sol, duran poco. Tendría que cambiar los obenques cada año... o dos... (palabras del mismo que me los vendía). Así que, sigo con el sintético y los... 10? 20? kilos de mas. Con la ventaja de los HFL... Volviendo a éstos, cómo no los puse antes... la tranquilidad que me dan sabiendo que no tengo que desconectar los obenques con el peligro que se caiga el palo, como tenía que hacer antes... 2 veces casi se viene abajo, por descuido mío... Ahora la maniobra es mucho mas relajada, y eso ayuda a salir con mas ganas.

Highfield Lever argento, listo para colocar. Se ven el perno y los 3 orificios.

Ya formando parte del obenque.

Extendido; al abrir el pontón, se pliega la manija, y se inserta el 
perno cuando los 3 agujeros se alinean.

Con la manija plegada, lo que permite acortar los 15 cm. aprox
necesarios al extender el pontón.

Entrando al club; soltando los HFL para poder plegar el pontón. Antes 
tenía que soltar el obenque y llevarlo a un punto en el casco principal.


  A las redes les pasé caño de aluminio en los bordes, para poder tensarlas mejor. Mejoraron bastante (y quedan mas lindas a la vista, como "mas sólidas")





En una salida con Andrés, probamos el enrollador de screacher. Si bien la vela no está preparada para enrollarse, algo conseguimos; necesito un cabo mas fino para dar mas vueltas al enrollar; puede ser la solución. Voy a intentarlo, ya que este finde pasado salí sin el enrollador, y en una maniobra de arriado, estaba con el cabo de la braza en la mano, de golpe la vela portó, y el cabo se escapó... quemándome la mano, dejándome exactamente nueve ampollas.... así que voy a seguir intentando el enrollador casero.

Screacher con enrollador puesto.


Me falta principalmente el techo de cabina nuevo, con la consiguiente chubasquera; el prolongador de caña; las canillas.... (¿alguna vez las haré?); un snoofer de spi... y decenas de pequeños ítems de la lista que siempre se renueva. Apunto a que mi familia se enganche aunque sea para unos días en las vacaciones; un lugar tranqui, tipo Río Negro. Y por otro lado alguna navegada mas larga, tipo Piriápolis; tambien a Tapera de Lopez o Gral lavalle quisiera ir en breve.
  Ah, me voy acostumbrando a la maniobra desde el trailer. No es tan grave. Los cáncamos quedaron muy bien, y hacen que la maniobra sea fácil. Y la verdad, la tranquilidad que me dá que el barco esté seco.... a esta altura ya tendría las bandas hechas un desastre si estuviese todo el tiempo en el agua....
Yo creo que fué una buena decisión.

Navegando con Norberto

Al timón, nada menos que Gerónimo Saint Martin.



Durante la salida con Gerónimo, descubro una grieta en un caño lateral del soporte del timón, que trabajaba con el mismo; no de extrema gravedad, pero sí para prestarle atención. Así que un buen día pelé la zona (todo de carbono con resina epoxy). Tenía un par de burbujas de aire en la unión, que no se habían llenado con resina, por lo que se rompió el laminado; pelé, rellené, y relaminé con carbono y epoxy. 


Pelada la unión, y la zona ahuecada. Luego, masilla epoxy de relleno, 
y encima el laminado.



Laminado. Luego se masilló y lijó. Me quedó por hacer la pintura.


Quedó bien, en las siguientes veces se bancó las pruebas, alguna con viento fuerte.
Detalles. Esto indica que a pesar del tiempo pasado desde la botadura, mi sensación de que el barco aún está "en pruebas", y que aún no está terminado, es real. Por eso seguimos... despacito.









martes, 25 de abril de 2017

El retorno del Titanio

El jueves Santo por fin el trimarán Farrier F-82 TITANIO volvió a surcar las aguas del Río de la Plata.
No fué nada extraordinario, no hubo grandes velocidades, ni spinnakers, ni sistemas nuevos que probar, ni puertos ajenos; ni brindis, ni fuegos artificiales, ni festejos. Una vuelta al perro muy tranquila, con vientos suaves. Pero significó mucho. Nada menos que cerrar el ciclo de reparación-repintado, un haber escalado la montaña y finalmente volver a la base, completando la misión.
  Unos días antes el barco fué al agua para ponerle el palo y llevarlo al muelle de la palera, para terminar la maniobra. En pocas horas tenía casi todo armado. Me quedaron algunas cosas, como la maniobra de los spinnakers.



Antes de poner el palo, revisación completa. Reparé la luz de tope y las de crucetas. 
El tope debe ser la mas fea del río, pero también la que más ilumina. 
Se ve hasta con plena luz del sol pegándole de lleno.

Luego le puse las redes nuevas. Grises, con el borde blanco, quedan mucho mas prolijas que las anteriores. La contra: los ollaos, de muy mala calidad, no duran nada. Así que ya las saqué y llevé a reformar; van a ir con un caño de aluminio de 1cm en los bordes, para tirar parejo.

  Luego de poner las redes y tirar el barco al agua (maniobra que ya me estoy empezando a acostumbrar, eso de ver el barco colgando) con el amigo Andrés Mabres, conocedor del comportamiento de un trimarán moderno, fuimos a navegar. Todo muy tranqui, pero con la emoción de volver a sentir el barco navegando, el viento, el flap flap flap de la roda cortando el agua.... la navegación a vela.

De lo que se trata todo esto al fin....

Reviviendo

Andrés en la caña.

Qué lindo se ve pintado....




Dejé el barco por 3 días en una amarra en el agua. Por un lado para ordenar el interior que era un caos luego de tantos meses de laburo. Por el otro, para probar a ver qué pasaba en 72 (75 mas exactamente) horas en el agua con la pintura del fondo y los pontones. Cuánto se ensuciaría-marcaría. Fué una sorpresa al sacarlo. Estaba casi intacto. Incluso los pontones, que ya no tienen antifouling. Pero el poliuretano ni se mosqueó. Solo por una línea que marcaba la flotación -que salió con un trapito de una pasada), el resto ni parecía haber tocado el agua. 

 Lo que entra adentro de un barco chico es increíble.

En la marina.


Ahora a arreglar las redes. Tambien me pidieron los marineros del club que le arme una funda al foque para cuando queda enrollado en la amarra (por seguridad), y que tense mas el palo. Estuve pensando mucho cuál es el mejor sistema. Finalmente decidí hacer los Highfield levers (no sé la traducción al español), que allá los vende Corsair Marine, pero que acá... hay que fabricarlos. Son unas palancas para cambiar la longitud de un cable. Me van a permitir aflojar los obenques sin soltarlos y cambiarlos de posición, como hacía hasta ahora, con el peligro de que si me olvido de tensar los falsos obenques bajos que van al casco central, se puede caer el palo. Me pasó dos veces, que no se cayó porque me colgué a último momento. 


Highfield lever

Así trabajan


  Le pedí los planos a Farrier sin saber si los tenía, y al otro día me los mandó. Eso aumenta la seguridad. Junto con las redes mas tensas, y un enrollador para el screacher, la cosa va a mejorar mucho. También en breve atacaré al pop-top, que ahora está suelto. Para que quede mas firme, y junto con una chubasquera, la cosa ya va a estar lista para viajar. 
  Ya dejamos los boxes y estamos de nuevo en la pista. Es el fin de una tarea pesada. De 15 meses. 
  Ahora empieza un nuevo camino.
  






domingo, 26 de marzo de 2017

Terminando

Los avances van lentos, pero es el ritmo que puedo en este momento, y decidí tomármelo así y listo. Sin presiones. Iremos al agua cuando tenga que ser.
Aunque ya falta poquito. Una de las cosas que me tenía trabado eran los cáncamos de izado. Es lo que me pidieron en el club para poder dejar el barco en tierra. 4 puntos de donde enganchar las lingas (¿o eslingas? ¿será que existen ambas definiciones?) para izarlo sin tener que pasarlas por debajo del barco, para que sea mas fácil y rápida la maniobra.
Pero izar el barco de 4 puntitos fijos... siempre pensando en que es de sandwich de divinycell, y que éste se podría aplastar y colapsar el sandwich....  Mas teniendo en cuenta que dichos puntos no están en los planos, por lo que había que elegir la ubicación. Y encima, al no estar previstos, no hay laminado preparado o reforzado en la zona, ni se reemplazó el divinycell por coremat en la zona, como se hizo en otros puntos de alta compresión (p. ej. traveler, rieles de escotas de foque, etc).
 Eso me hizo dudar mucho; con lo que inconcientemente lo iba dejando de lado. Finalmente tuve que enfrentarlo. Los de proa fué mas fácil, elegí ponerlos en donde van los anclajes que sostienen al palo en la amarra, por lo que sí tenía refuerzos abajo. El tema era los de popa.... Busqué en los foros cómo lo hacían afuera. Encontre que Farrier había subido los planos de dónde iban en el F-27. Le consulté por email si podía hacer algo parecido en el F-82, y me dió el OK. Por lo que los puse casi pegados a los molinetes. De esta forma el barco queda equilibrado al levantarlo.
Agujereé, puse los cáncamos, y atrás de cada uno una planchuela de aluminio de 4mm, de 9x18 cm, apoyadas sobre cama epoxy. Compré las lingas, un grillete automático de 1800kg. en cada uno, y a probar.... con mucho miedo, yo adentro mirando si había algún "crack"... por suerte salió todo muy bien. Me bajé y dejamos el barco colgado mas de una hora, mientras yo trabajaba en el trailer. Un alivio. Quedó muy bien.

Ya están puestos los plotters. Armé toda la maniobra, incluído el traveler que pensaba cambiar pero tendrá que esperar. Ahora falta terminar el trailer (menudo laburito), arreglar un par de cositas del palo (luces y la driza del foque que se piantó), y ordenar todo el interior que es un caos.
Y luego sí, vuelta al agua. El techo de la cabina, incluída su nueva maniobra, quedará para mas adelante. Son varias las cosas de la lista que postergué.

Ploteados

Se le agregaron unos tonos azulados, para que dé mas "metálico"


Cáncamo de izado

Planchuela de aluminio sobre cama epoxy

Tuve que cortar el tapizmel en la zona. Por suerte sale fácil. Un material muuy bueno.

Al otro día, con el epoxy fraguado, ya cortados y con tuercas ciegas.
Izando por primera vez.

 




 




Una visita de lujo: Gerónimo Saint Martín. Gerónimo es un navegante famoso en nuestras tierras. Está en el libro Guiness por ser el navegante que llegó más al norte con el barco más pequeño. Llegó al casquete polar ártico, por encima de los 80 grados norte, con un H-20. Sí, el barquito de la clase que más hay en nuestro país, ese pequeño grande de 20 pies. Salió para Brasil sin fecha de regreso, y luego se fué estirando en una vuelta que le llevó una década... Alcanzó el pueblo de Longyearbyen, en la isla de Spitsbergen, Islandia. Allí se cargó con unos dibujos de los chicos de una escuela, para llevárselos a otra escuela... de Ushuaia! Del pueblo mas boreal al mas austral, en el H-20. Luego se volvió a Baires.
  Gerónimo se interesó mucho en el Titanio cuando lo vió en el varadero. Quedamos en salir a navegar cuando esté listo. ¡Todo un lujo!

jueves, 5 de enero de 2017

Pintura

Hoy terminé de blanquear todo. Sólo faltan los antideslizantes del cockpit y pulir todo. (lo que significa lijar tooodo con 600 y otra vez con 1500....). Había jurado en 2013 que la próxima vez que lo pintara no lo puliría, pero la verdad.... tantos meses de esfuerzo y no hacer el último paso... Aparte esta vez lo pinté con Adiabatic (no conseguí compresor) y queda un poco grueso.
Luego armar, y listo. A navegar, que de eso se trata, y en 6 días se cumple un año de la última vez.... cómo pasa el tiempo.






Esta vez va todo blanco, incluso los antideslizantes que quedaron, que eran grises. Muy bonitos, pero probaron ser "impisables" en verano.